El alma de esta novela no es el brutal y salvaje
asesinato que se comete, es el policía, de nombre Melchor, que destinan para
investigarlo.
Es su pasado, viviendo el presente, lo que hace
que Melchor, a veces, no ponga límites entre lo bueno y lo malo, si actuar con
justicia o tomarse la justicia por su mano.
En ese pasado oscuro de Melchor, mientras cumple
condena en la cárcel, otro preso la presenta la novela de "Los
Miserables" de Victor Hugo. La lee en más de una ocasión y se identifica
con ella hasta el punto de creerse a veces, Jean Valjean, a veces, el inspector
Javert. Su hija se llama Cosette.
Es una novela fácil de llevar. Por un lado hay
que intentar resolver un asesinato que, en el comienzo, parece muy complicado
por cómo se ha cometido, pero más tarde se va intuyendo quienes pueden ser los
autores. Y al mismo tiempo, el presente y pasado de Melchor que, como he dicho
antes, es el alma de la novela. Es lo que la salva.
Es el primer libro que he leído de Cercas y no
me ha dejado indiferente, algo que no me ha ocurrido con "El
inquilino" Ahora tengo pendiente "Independencia" que espero no
me defraude.
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