AUTOR: Panait Istrati
EDITORIAL: Funambulista
PUBLICACIÓN: 2025
Panait Istrati fue un escritor rumano
autodidacta, obrero y viajero incansable, cuya vida estuvo marcada por el ideal
de justicia y la desilusión ante la corrupción del mundo. Este libro refleja esos
momentos de desencanto y desilusión.
¿Merece la pena luchar por unos ideales sabiendo
que son un imposible?
En La casa Thüringer hay alguien que
refleja esa pregunta; se trata de Adrian Zograffi, el protagonista de la
historia.
Supongo que es algo natural, al final de
la vida, cuando el tiempo se acaba, que acude a la mente todo aquello que más pesa;
suele ser más lo malo que lo bueno. Parece que haciendo un recuento de todo lo
ocurrido se tranquiliza la propia conciencia, y ayuda a morir en paz con uno
mismo.
Con una prosa tranquila, sin altibajos,
el autor crea a Adrian, un personaje que es su fiel reflejo, para hacer balance
de una existencia vivida entre la esperanza y la desilusión, cuando la muerte
ya se adivina cercana.
El Prefacio tiene un tono de confesión
amarga. Es la de un hombre que no ha encontrado en la vida lo que buscaba, que
se ha resignado a aceptar que ese ideal de autenticidad en las relaciones
humanas es imposible. Su enfado demuestra no admitir la derrota total.
Adrian nació en la casa Thüringer, y es hijo
de una lavandera y de un padre ausente. Desde su posición humilde, la primera
impresión es la de un joven orgulloso y con cierto grado de soberbia. Se sabe
capaz, independiente, con principios, y no quiere que su felicidad dependa del
dinero ni de la aprobación de otros.
Aún es joven y le falta madurez, el trato
con los amos le permite conocerlos y descubrir que en la casa Thüringer no
existe la diferencia social que él creía.
Al principio, Adrian conserva intacto su
ideal de honestidad y dignidad personal, pero en la convivencia con el
matrimonio Thüringer sus ideales comienzan a chocar con la realidad.
En Ana descubre una mujer inteligente y
sensible que le habla sin la imposición social que los separa, alguien que
parece compartir su forma de ver el mundo. Aun así, ve en ella cierta
tolerancia hacia las injusticias que la rodean, quizá porque no puede ver la
intimidad de su vida ni los pequeños gestos a los que se resiste, como cuando
evita asistir al salón de invitados para no fingir simpatías que no siente.
El señor Thüringer lo desencanta más
porque él si representa el poder y la satisfacción de quien se cree dueño de
todo.
Estos dos referentes marcan el comienzo
del desencanto de Adrian. Es cuando comprende que la bondad individual es
posible, pero no basta para transformar una sociedad que está basada en la injusticia,
el egoísmo y la desigualdad.
En esta desilusión de Adrian, pero en la
que sigue latiendo el mismo impulso, la novela da un giro y traslada los
ideales de este al terreno político. Tal vez la unión de los hombres consiga lo
que una voluntad aislada no puede.
Pero el entusiasmo de Adrian también acabará
con la misma desilusión. Un gran desastre provocará no solo la desgracia de los
trabajadores, también llevará a la ruina a las dos casas de armadores. Este
triste acontecimiento, provocado en parte por los que proclaman la justicia,
guiados por la ambición y la traición lleva a Adrian a una triste reflexión: la
ruina del rico no cambia el corazón de los hombres. Ni la política ni el dinero
logran corregir la incapacidad humana para ser justa.
Creo que esta reflexión resume bien el
mensaje que el autor quiere transmitir.
Al final, todo parece volver a la
pregunta del comienzo: ¿merece la pena sostener unos ideales imposibles? Adrian
Zograffi no tiene una respuesta, pero si ha aprendido una certeza: vivir sin
ideales sería aún peor. Aunque la desilusión lo acompañe, no pierde su fe en la
justicia y la dignidad del ser humano.
CITA:
¡Nuestros pobres destinos! Antes de ser
escritor, he desempeñado muchos trabajos forzados, pero no sospechaba por aquel
entonces que me quedaba por conocer el mas inhumano de todos: el que se
practica ante la admiración de la gente, y al final del cual naufragan al
unísono el cuerpo y el alma.