AUTOR: Patrick Rothfuss
PUBLICACIÓN:
03/01/2013
EDITORIAL:
DEBOLSILLO
No sabría decir si El temor de un hombre sabio me ha gustado más que El nombre del viento. Creo que los dos están a la misma altura, y no he sabido apreciar la diferencia de que el segundo es mejor según que lectores. Aunque el final de este que reseño ha sido buenísimo, seguimos estando a "dos velas".
Es el segundo día de la historia de Kvothe. Seguimos
avanzando en la complicada vida de un personaje que parece envejecido en los
Interludios, esos pequeños descansos que se toman, unas veces para reponer
fuerzas y otras como descanso emocional.
No ha pasado más tiempo del que se toman para dormir y retomar la historia al día siguiente. Solo un día y parece que ha pasado toda una vida.
Kvothe continúa en la Universidad, trabajando para pagar las
matrículas y buscando a Denna. Siempre se buscan el uno al otro y no siempre se
encuentran. En realidad se atraen pero parecen destinados a vivir sus días
encontrándose, o buscándose. ¿Están enamorados? Denna da a entender que si pero
él solo siente cariño, al menos eso es lo que afirma. Aunque no puede negar que
se siente atraído. Al mismo tiempo Denna le desconcierta, no la conoce lo
suficiente como para amarla: -"No puedo
amar algo que no comprendo".
Kvothe es orgulloso y se reconoce como persona inteligente. Falla en la paciencia, que no tiene y comete errores. En el segundo libro ha crecido como persona.
Un descanso de la Universidad, aconsejado por sus amigos y
algunos profesores, lo llevan a Vintas. Allí están sus orígenes, eso es lo que
creemos. Todo apunta a que lleva sangre noble pero él lo desconoce. Recomendado
por Trephe, un conde que ejerce de mecenas, viaja hasta Severen para instalarse
en el palacio del maer Alveron.
Una vida muy interesante le espera; también a los lectores.
Lo aprendido en la Universidad le valdrá para descubrir el intento de asesinato
contra Alveron. Esto no estaba previsto pero sí que corteje a Meluan, lady
Lacklees. El maer quiere casarse con ella y manda a Kvothe para que haga de
celestino y le prepare el terreno. De alguna forma tiene que conocer a la que
suponemos que es la hermana de su madre.
Lo más interesante tiene lugar cuando el maer encomienda Kvothe la misión de dirigir un grupo de
mercenarios. El objetivo es acabar con los bandidos que atacan los caminos que
recorren sus recaudadores.
En esta aventura ocurren muchas cosas, y otras se intuyen. Si
hay algo que muchos de los lectores de esta novela hemos hecho ha sido sospechar,
imaginar, intentar resolver,…Esto último es
imposible. Rothfuss da muchas pistas, muy bien administradas, de manera
que el lector ha de estar atento en todo momento. Es un excelente contador de
historias.
Estará con Felurian en el mundo Fata ,y vivirá con los Adem antes de volver al palacio del maer. Estas experiencias le aportarán dos elementos importantes de los que ya no prescindirá. Se perfecciona como Nominador. En realidad lo es desde siempre, pero tiene que descubrirlo. Tiene todas las cualidades para ser un Táborlin el Grande.
Se mantienen los personajes principales del primer libro y
aparecen nuevos. De los primeros hay uno que adopta diferentes personalidades:
-Se trata de Ceniza. Es un Chandrian que intervino en la matanza de la troupe y
los padres de Kvothe en El nombre del viento.
Se cree que Ceniza es también el jefe de los bandidos que el
maer quiere eliminar, Bredon que vive en la corte del maer, y el mecenas de
Denna en El temor de un hombre sabio.
La canción de lady Lackless en el primer día es un acertijo
que parece resolverse al final del segundo día. Pero no es así.
Lo que sí está claro es que Rothfuss nos vuelve a dejar con
un montón de incógnitas que no podemos resolver, pero si debatir y sacar
conclusiones personales.
Es cierto que ha tenido mucha crítica negativa, por la
tardanza en las publicaciones y porque hay cierto público que tiene la opinión
de que es una novela que le ha resultado aburrida.
En cualquier caso me ha parecido una novela fantástica, inusual por como la ha construido y muy gratificante. Las notas que he ido tomando de los dos libros dan para mucho. ¡Hay tanto que comentar…!
Lo que veo imposible es que en el tercer día Rothfuss lo resuelva
todo. Sería resumir demasiado y eso no es lo que esperamos. A esperar toca.