Era una diosa de la magia,
conocimiento del que hace uso en esta historia contra sus enemigos, contra
quien la ofende y para proteger a su hijo.
Es un personaje mitológico del que no
recuerdo haber oído hablar, mientras que de otros más conocidos sí.
La autora nos presenta a la diosa
desde su infancia, imagino que para familiarizarnos bien con el personaje, y
pueda leerse por un público sin conocimientos en mitología, pero como dije
antes, la parte novelada puede llevar a confusión, al menos a mí me pasó.
Es el personaje principal y la
narradora de su vida, por lo que todo lo que haga, diga o piense, será desde su
punto de vista, es como vivir su presente al mismo tiempo que ella.
La frase con la que comienza la
narración: "Cuando nací, no había palabra para lo que yo era" lleva a
pensar que Circe no es alguien importante. Su infancia transcurre en una
familia que no la valora, no es bella y voz es desagradable, siempre a la
sombra de todos; es una diosa pero con sentimientos hacia los humanos.
Es desterrada, por ciertos
comportamientos, pero no es cobarde y en la isla donde debe cumplir su castigo
pondrá a prueba sus poderes.
La autora describe en Circe un
personaje fuerte que, a medida que va creciendo, su protagonismo aumenta, se
hace más poderosa, y los que siempre han sido considerados como los mitos más
importantes en la jerarquía mitológica, parecen más pequeños ante ella.
¿Algo negativo que reseñar? Hay
momentos que me han resultado monótonos o pesados porque la autora reincide en
un tema o conversación.